

Somos un taller de alfarería tradicional en el que preparamos nuestras piezas desde la extracción del barro hasta el modelado y cocción de las mismas.
En nuestro taller-tienda-museo podréis ver una muestra de todo lo que hacemos y asistir a una demostración in situ de la creación de una de nuestras piezas.


Alfarería Rodríguez: tradición legendaria
En la antigüedad el oficio de alfarero fue poco a poco integrándose en Hispania bajo la potestad de Roma. No sólo llegan grandes cantidades de cerámica, sino también operarios que llevan e implantan su técnica y su saber. A partir del siglo I a. C., procedente de la Magna Grecia, se introduce en todo el territorio las primeras vajillas finas y los vasos de colores vivos, piezas que son copiadas en todos los talleres artesanos. Destacan las obras de barniz negro y barniz rojo, con paredes finas y la cubierta vidriada, y los tipos más abundantes son las ánforas, lucernas y vajillas. Las vajillas se realizan en diversas modalidades pero de terra sigillata es la preferida y se solía realizar con una decoración en relieve, con galba de color rojo. Los centros de producción en la península se encontraban en Teruel, Granada, Andújar, Linares Solsona, Mérida y La Rioja.