Ejecuta los bordados típicos de la comarca de Las Hurdes, con técnica exquisita. Su referencia se encuentra siempre en los motivos tradicionales, en el dibujo con reminiscencias árabes y la habilidad para manejar los hilos sobre el lino o el lienzo. Así surgen trajes típicos, manteles, mandiles, paños, faldas, chalecos o colchas.

Eutimia aprendió. de niña de las enseñanzas de una señora mayor de su pueblo, Pinofranqueado, Eliodora Bravo a la edad de nueve años, que enseñaba el arte de un bordado diferenciado del de Lagartera. “Los dos van contando sobre el hilo, pero el lagarterano va haciéndolo en cuadros y el hurdano en redondo”.

La característica del trabajo de Eutimia es el tesón que como muchos hurdanos pone en la conservación de las tradiciones hurdanas y en su especial habilidad por los trabajos manuales.

El bordado hurdano se remonta al siglo XVII y siempre ha gozado de una gran reputación dentro del bordado clásico español.